Marcel, Bip y los mimos eternos


Este mimo francés, considerado uno de los mejores del mundo, aplica la filosofía de la vida en cada frase que se desprende de su boca y señala que es "pesimista y optimista", para añadir que aún tiene intacta la esperanza en el Hombre. Nacido en Estrasburgo (Francia) en 1923, realizó giras por varios países europeos y latinoamericanos, aunque nunca abandonó su escuela de mimo en París, cantera de los actores que componen su Compañía de Mimodrama. En esta escuela, Marcel Marceau impartió clases a alumnos de varios países, entre ellos de Japón, Alemania, Estados Unidos, España, Francia -"evidentemente", apunta- e incluso cuenta con esporádicos alumnos de Corea y de Hong Kong.


En cada ciudad del mundo en las que Marcel Marceau ha actuado su espectáculo ha servido de plataforma para el interés de nuevos artistas que desean estudiar con él, y, en cierto modo, seguir sus pasos en el arte del mimo, un espectáculo que el artista francés compara con la música, por su universalidad y porque la entiende todo el mundo. El fondo del arte del mimo no se transforma, en su opinión, pero sí su expresión exterior, pues los cánones en los que se inspiran cambian, de ahí que Marceau afirme que "la gramática del mimo ha cambiado". Marcel Marceau se siente cercano al dolor de los desvalidos en conflictos, aunque matiza que el terrorismo y las guerras han existido siempre y que seguirán ocurriendo: "yo soy realista en la vida y sólo sueño en el teatro", afirma. En línea con su pensamiento cargado de realismo aseguró que "el hombre es un animal de teatro" y que mucha de su inspiración está tomada de los animales, de los que aprende determinadas manifestaciones pero a los que "también mata y se come" y asevera con contundencia: "si el hombre continúa al ritmo de destrucción actual acabará con el planeta".


Para este artista, que también es pintor y escritor, el escenario es el lugar de transmitir todos los sentimientos humanos, el dolor y la felicidad, y considera que aunque la tecnología ha avanzado a pasos agigantados "el corazón del Hombre no cambia nunca". Es por ello que su mítico personaje Bip, creado en 1947, es totalmente actual, no es preciso modificar un ápice de su mensaje en ningún momento porque los sentimientos que lo mueven ahora son los mismos que lo inspiraron en su momento, una figura influenciada por Charlie Chaplín. Marcel Marceau afirmó que el hombre avanza y retrocede constantemente, y que el teatro, en particular, y el arte, en general, prevalece sobre todo ello: "el arte es una expresión universal que no tiene idioma".

Este es un homenaje brevísimo al ser espectacular que convivió entre el silencio y la sonrisa. Hace un año, el 23 de setiembre del 2007, Marcel Marceau murió en Paris a los 84 años

1 puntos de vista:

Anónimo dijo...

EStoy casi segura que no solo se influenció de Chaplin, sino que tambien fueron amigos íntimos.
Lindo blog, Rebecca...